Pequeño maestro

belina.png

"Mi Dios está vivo y tiene el control"

Por Velina Rivera 

Los últimos días he pasado por algunos problemas de salud. Y en muchos momentos y con la incertidumbre a la puerta, pensamientos negativos atravesaron mi mente y mi corazón: “¿Qué pasará con mi hijos? ¿Y con mi esposo? ¿Y si ésta enfermedad es larga y costosa?”

Al mismo tiempo, el Espíritu Santo me llevó a recordar: “Confía en Dios”. Con sinceridad puedo decir que sí, algo en mí confiaba, pero no podía sacar de mi mente la preocupación. Así que tomé un tiempo para orar. “Señor ayúdame con esto”, le pedí. 

No había terminado cuando mi hijo mayor (no tan mayor pues tiene 7 años) rodeó con sus bracitos mi cuello y me dijo: —Mami te amo. 

Mientras mi pequeña se acomodaba en mis piernas, él siguió hablando: —Quiero que sepas que no tienes nada de qué preocuparte. Si llegaras a morir, debes saber que te amo y me haré cargo de que mi hermanita esté bien. Te quiero mucho, si te mueres, cuando yo muera nos veremos en el cielo. 

—¿De verdad lo crees? —le interrumpí.

—¡Claro! —me aseguró y añadió— y Mami, cuando llegues por favor escoge una casa bien grande para que todos entremos ahí.

—Pam —me dirigí a mi hija— ¿tú también crees que al morir iremos al cielo?

—Sí —contestó— Jesús vive en nuestro corazón. Sí mamá.

Me costó mucho trabajo contener las lágrimas. Pero con gratitud suspiré. 

—¡Gracias Dios! Has usado a mis hijos para hablarme —suspiré—, sé que si muriera iría a tu presencia y sé que en el corazón de mis hijos por tu bondad está sembrado el Evangelio. Estoy segura de que estás en control de mi familia.

Cuando este momento maravilloso terminó, una paz profunda inundó mi corazón y mi mente se fortaleció con una renovada convicción: “Mi Dios está vivo y tiene el control”.

Tomado de la revista Prisma Vol. 43 No. 5, sep-oct 2015.

Anterior
Anterior

Ya voy a cambiar

Siguiente
Siguiente

El significado de la Navidad