Dios no contesta las oraciones cuando
10 advertencias documentadas en las Escrituras
Redacción de Prisma
¿Cuántas veces hemos estado clamando a Dios por algo y sentimos que nuestras oraciones no pasan del techo? He aquí algunas razones por las cuales esto nos puede suceder. Vale la pena reconsiderar nuestros caminos.
Desobediencia
“Así como ellos se negaron a escuchar cuando los llamé, tampoco yo los escuché cuando clamaron a mí, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales” (Zacarías 7:13 NTV).
Pecado en secreto
“Si no hubiera confesado el pecado de mi corazón, mi Señor no me habría escuchado” (Salmo 66:18 NTV).
Negligencia
“Los que tapan sus oídos al clamor del pobre tampoco recibirán ayuda cuando pasen necesidad” (Proverbios 21:13 NTV).
Indiferencia a la Ley de Dios
“Dios detesta la oración del que no hace caso de la ley” (Proverbios 28:9 NTV).
Asesinar a víctimas inocentes
“Cuando levanten las manos para orar, no miraré; aunque hagan muchas oraciones, no escucharé, porque tienen las manos cubiertas con la sangre de víctimas inocentes” (Isaías 1:15 NTV) .
Iniquidad
“Son sus pecados los que los han separado de Dios. A causa de esos pecados, él se alejó y ya no los escuchará” (Miqueas 3:4; Isaías 59:2 NTV).
Terquedad
“Sin embargo, el pueblo respondió: ´No gastes saliva. Continuaremos viviendo como se nos antoja y con terquedad seguiremos nuestros propios malos deseos´ Así que esto dice el Señor: . . .Cuando tengan dificultades, les daré la espalda y no prestaré atención a su aflicción” (Jeremías 18:12, 13a, 17b NTV).
Inconsistencia
“. . . Asegúrense de que su fe sea solamente en Dios, y no duden, porque una persona que duda tiene la lealtad dividida y es tan inestable como una ola del mar que el viento arrastra y empuja de un lado a otro. Esas personas no deberían esperar nada del Señor” (Santiago 1:6-7 NTV).
Envidia
“Desean lo que no tienen, entonces traman y hasta matan para conseguirlo. Envidian lo que otros tienen, pero no pueden obtenerlo, por eso luchan y les hacen la guerra para quitárselo. Sin embargo, no tienen lo que desean porque no se lo piden a Dios. Aun cuando se lo piden, tampoco lo reciben porque lo piden con malas intenciones: desean solamente lo que les dará placer” (Santiago 4:2-3 NTV).
Tratar mal a la esposa
“De la misma manera, ustedes maridos, tienen que honrar a sus esposas. Cada uno viva con su esposa y trátela con entendimiento. Ella podrá ser más débil, pero participa por igual del regalo de la nueva vida que Dios les ha dado. Trátenla como es debido, para que nada estorbe las oraciones de ustedes” (1 Pedro 3:7).